No a todos les gustan las despedidas de solteros
Cuando los hombres se van a una despedida de soltero, pueden surgir ciertas preocupaciones o molestias en las parejas. Es muy común que en este tipo de viajes, los drinks y la fiesta no falte; y sin importar la confianza que se tengan, a ninguno de los dos se les hará muy gracioso saber que exista “algo” que pueda poner en riesgo la relación”. La base de cualquier relación es la buena comunicación y el respeto para que todo fluya perfectamente.
Evitar hacer esto cuando tu pareja este en una despedida de soltero
A continuación enlistamos las cosas que a los hombres les choca, una vez que hayan anunciado que tienen un próximo viaje de despedida de soltero, ya sea como el protagonista del mismo o como acompañantes de algún amigo
Reclamarle por qué van ciertos amigos. Cuestionar por qué fue invitado tal persona que tú consideras que es “mala influencia”. Es confiar muy poco en tu pareja, podrá caerte mal uno de sus amigos, pero debe ser más fuerte la confianza entre ustedes dos.
Amenazar con que tú harás lo mismo. Advertir constantemente que tú, así como él, te vas a ir de viaje con tus amigos, o que si él hace algo que no te gusta, tú harás lo mismo. Sin duda una señal de tu inseguridad.
Prohibirle cosas. Este es de los peores errores, y lo único que vas a lograr es que se enoje. Las parejas son para apoyar, alentar y también para encauzar, pero no para prohibir. Así como tú tienes derecho a divertirte él también, a ti no te gustaría que te prohibiera tomarte un drink más, salir de antro o de plano, seguir la fiesta.
Escribirle constantemente. Olvídate de mandarle mensajes todo el día durante el viaje. Imaginemos que en algún momento se le olvida contestarte, en automático pensarás lo peor. Uno o dos mensajes durante el día serán suficiente para desearle que se divierta.
Pedirle detalles del viaje. Cuestionarlo de qué fue lo que hicieron, a donde fueron, qué tomaron y si hubo otras personas que no son parte del grupo de amigos, son el tipo de cosas que pueden orillarlo a dos cosas, que te diga una que otra mentira piadosa o que diga algo que moleste.
Si dudas de tu pareja, muchas veces es dudar de ti mismo (a).