¿Habías escuchado sobre las hipótesis de la simulación? Esto es lo que nos dice la propuesta que algunas películas empezaron a difundir.
Nuestra especie puede distinguirse de otras por varias cosas, pero la curiosidad, tan amplia, profunda e insaciable del ser humano, es tal vez una de nuestras mayores características. Naturalmente, conforme el pensamiento se desarrolla, más preguntas tenemos, y las respuestas que obtenemos nos crean nuevas dudas. Imagina entonces lo que sucede cuando llevamos esa curiosidad a lo más fundamental, es decir, a nuestro origen y al del mismo Universo. Para eso, algunos dicen, tenemos la hipótesis de la simulación.
Probablemente has escuchado hablar sobre este tema, con ideas, ejemplos y hasta algo de humor sobre las fallas que se presentan en esta presunta realidad artificial. Pero, ¿en qué consiste este supuesto que, aunque para algunos es de lo más descabellado que se ha propuesto, sigue sumando adeptos en diferentes áreas del conocimiento? Te contamos lo que sabemos.
¿Qué propone la hipótesis de la simulación?
De acuerdo con la hipótesis de la simulación, toda nuestra realidad terrestre, incluida la que va más allá del mundo de habitamos, es producto de la elaborada creación de una civilización muy avanzada.
La posibilidad empezó a explorarse desde 2003, siendo el filósofo Nick Bostrom el primero en hablar formalmente de ella, en un artículo titulado “Are You Living in a Computer Simulation?”.
En la ciencia ficción esta idea ya había sido tocada. Qué mejor ejemplo que el de la tetralogía de películas de Matrix. Sin embargo, con un vistazo mucho más serio, Bostrom señaló que, si la probabilidad de que hayan civilizaciones extraterrestres bastante desarrolladas es tan grade, por qué no podríamos ser una suerte de experimento para alguna de ellas.
¿Es posible?
Aunque te cueste creerlo, muchos científicos y filósofos han ofrecido su atención a esta posibilidad, que precisamente se plantea como eso: una posibilidad. Esto quiere decir que, si bien no podemos tomarla como la verdad que tanto ha buscado nuestra especie, tampoco tenemos todavía recursos tecnológicos e intelectuales para descartarla.
Para algunas personas esta hipótesis sienta bien, pues frente a tanto misterio, principalmente en lo tocante al espacio exterior, la idea de que la realidad tenga sus propias fronteras, y no sea en apariencia infinita, ofrece más calma y hasta sentido con lo que hasta el momento conocemos. ¿Tú qué piensas al respecto?