El 6 de junio, los 20 clubes que integran la Premier League se reunirán en una asamblea general para votar una propuesta que podría cambiar drásticamente la forma en que se arbitran los partidos. Wolverhampton ha enviado una solicitud formal para eliminar el VAR (Video Assistant Referee) a partir de la próxima temporada. Esta iniciativa surge después de una serie de controversias y críticas sobre el impacto negativo del VAR en el fútbol inglés.
El VAR llegó de buena fe, pero ya es hora de su final
Wolverhampton ha sido claro en su postura, argumentando que aunque el VAR fue introducido en la temporada 2019-20 con la intención de mejorar el arbitraje, ha generado numerosas consecuencias negativas. Según el comunicado del equipo, el VAR ha dañado la relación entre los aficionados y el fútbol y ha debilitado el valor de la marca Premier League.
Uno de los puntos más destacados en el comunicado de los Wolves es cómo el VAR ha afectado la celebración de los goles y la pasión en los estadios. La revisión de jugadas crea confusión y largas pausas que enfrían la emoción del momento, disminuyendo la espontaneidad y el júbilo que son esenciales en el fútbol.
Wolverhampton también señala que el VAR ha provocado una disminución en la responsabilidad de los árbitros en el campo y ha erosionado su autoridad. A pesar de las múltiples repeticiones y revisiones, los errores continúan ocurriendo, lo que frustra a los aficionados que esperan decisiones más precisas y rápidas. Además, el equipo menciona que el tiempo añadido y las prolongadas interrupciones son un detrimento para el flujo natural del juego.
Errores recientes y controversias
La propuesta de eliminar el VAR también se fundamenta en varios errores notorios que han ocurrido durante la temporada actual. Un ejemplo destacado es el partido entre Tottenham Hotspur y Liverpool, donde un gol legítimo de Luis Díaz fue anulado por un error de comunicación entre el árbitro del VAR y su asistente. Este tipo de errores han aumentado la desconfianza en la tecnología y han generado críticas tanto de jugadores como de aficionados.
Para que la propuesta de Wolverhampton prospere, se necesita el apoyo de al menos 14 de los 20 clubes de la Premier League en la asamblea del 6 de junio. Este debate no solo es sobre la tecnología en sí, sino sobre el equilibrio entre precisión y la esencia del juego. Wolverhampton argumenta que el precio pagado por una pequeña mejora en la precisión es demasiado alto y va en contra del espíritu del fútbol.
Opinión de los aficionados
La percepción de los aficionados también juega un papel crucial en este debate. Aunque muchos pensaron inicialmente que la tecnología sería una herramienta valiosa para mejorar la justicia en el fútbol, ahora cuestionan su eficacia debido a los largos tiempos de espera para las decisiones y los errores que persisten a pesar de las revisiones. La paciencia de los aficionados se está agotando, y muchos están volviendo a abogar por un juego más fluido y menos interrumpido.