Si eres amante del cine y las historias basadas en hechos reales, La chica de la aguja (The Girl with the Needle) es una película que no te puedes perder. Nominada al Oscar como Mejor película de lengua extranjera, esta desgarradora historia nos lleva a una época oscura de la historia de Dinamarca, donde la guerra no solo se libraba en las trincheras, sino también en la sociedad misma, en el sufrimiento de mujeres y niños inocentes.
La película nos transporta a Copenhague, 1919, donde Karoline, una joven desesperada por sobrevivir en medio de las secuelas de la Primera Guerra Mundial, se ve obligada a aceptar un trabajo en una agencia de adopciones clandestinas dirigida por la enigmática Dagmar. Lo que parece una oportunidad para mejorar su vida y la de su bebé pronto revela una realidad mucho más aterradora. Los niños que Dagmar promueve como adoptados no van a hogares amorosos; son víctimas de horrendos crímenes. Y mientras Karoline comienza a desentrañar la verdad, se enfrenta a un dilema moral que amenaza con desmoronarla.
Una de las características más destacadas de La chica de la aguja es su poderosa fotografía en blanco y negro, que captura de manera sublime tanto la belleza como la brutalidad de la historia. Cada fotograma, cada escena, está impregnada de emociones profundas, llevándonos a sentir en carne propia la desesperación de los personajes. Además, las actuaciones son impresionantes, especialmente la de la protagonista, quien logra transmitir el dolor y la incertidumbre de una mujer atrapada en un sistema cruel y despiadado.
La historia real de La chica de la aguja
Lo realmente impactante de esta película es que está basada en hechos reales. La historia de Karoline está inspirada en una mujer que, en la vida real, ayudó a identificar y detener a Dagmar Overbye, quien fue acusada de asesinar a al menos 26 bebés entre 1915 y 1921. Utilizando métodos como ahogamiento y estrangulamiento, Dagmar engañó a madres desesperadas para obtener dinero, mientras ocultaba los crímenes y enterraba a los niños sin dejar rastro. Fue arrestada en 1921 y condenada a muerte, convirtiéndose en una de las figuras más infames en la historia de Dinamarca.
Este caso, uno de los más horribles de la historia del país, es el que inspira la película, una obra cinematográfica que no solo emociona, sino que también genera una reflexión profunda sobre la oscuridad de la naturaleza humana y las consecuencias de la desesperación en tiempos de guerra.
Horrores reales
Magnus von Horn, director de esta maravilla del cine danés, afirma acerca de su más reciente creación:
“Desearía que esta película fuera simplemente una historia del pasado, pero no lo es, y ahí radica el horror del asunto”, afirma el director. “Por un lado, está lo que hizo que la historia de Dagmar Overbye me pareciera interesante la primera vez que la escuché, pero también hubo una sociedad y razones alrededor de ella. Dagmar no sólo secuestraba bebés para matarlos, sino que las mujeres venían y le entregaban niños porque no podían lidiar con ellos y no tenían otra opción. En ese sentido, creo que se conecta con aquellos lugares del mundo donde las mujeres todavía no tienen libertad de elección o no pueden tomar una decisión de este estilo por sí mismas porque es ilegal. Ese escenario abre la puerta a diferentes tipos de alternativas en las sombras. La parte de terror de esta historia es que se conecta con el mundo actual. Por supuesto que es diferente, pero vivo en Polonia, donde la mayoría de las leyes más restrictivas sobre el aborto se introdujeron en 2020".
¿Dónde ver La chica de la aguja?
La película se estrenó en cines el 9 de enero, pero si no tuviste oportunidad de verla en pantalla grande, La chica de la aguja ya está disponible en Mubi en México desde el 24 de enero, para que puedas disfrutar de esta impresionante obra que te hará reflexionar sobre las realidades más crudas de la vida.
