En un escenario que parecía sacado de un sueño, Dolce & Gabbana llevaron su desfile Alta Sartoria a Cerdeña, capturando la esencia de la isla con una colección que combinaba tradición y modernidad. Este evento no fue solo un desfile de moda, sino una celebración cultural que reunió a mil personas en un ambiente que evocaba las fiestas locales, enriquecido con la presencia de celebridades, prensa y compradores internacionales.
Dolce & Gabbana deslumbran en Cerdeña con Alta Sartoria
La alfombra verde que guiaba a los invitados a través de una majestuosa masía era solo el comienzo de una noche mágica. Dolce & Gabbana transformaron el espacio en una pasarela que homenajeaba las festividades sardas, particularmente la fiesta de Sant’Efisio. “La inspiración de este desfile es la fiesta de Sant’Efisio, que se celebra cada año del 1 al 4 de mayo en Cagliari”, explicó Domenico Dolce antes del evento. “Es un acontecimiento increíble. Hay carros tirados por bueyes adornados con flores. Luego están las Amazonas, mujeres a caballo vestidas y enjoyadas. Hoy tendrán la oportunidad única de ver este desfile casi al completo”.
Una colección rica en detalles
La colección Alta Sartoria no solo se distinguió por su impresionante detalle, sino también por su profunda conexión con la cultura local. Las prendas presentaban diseños florales elaborados con técnicas como el petit point, ganchillo, y bordados con cannettes y cristales, evocando la infiorata de Sant’Efisio, una tradición donde las calles de Cagliari se cubren de pétalos de rosa. Los cortes y volúmenes de las prendas masculinas se inspiraron en la moda tradicional sarda, ofreciendo una autenticidad que pocas veces se encuentra en la alta costura.
Stefano Gabbana subrayó la influencia española en la moda sarda, mencionando cómo la isla absorbió tendencias durante los cien años de dominio español. Esta influencia se reflejó en tejidos como el moaré, encaje con volantes y terciopelos finos, y en técnicas de tejido como los pibiones. “Los españoles estuvieron aquí cien años más que el Reino de las Dos Sicilias, así que en Cerdeña tuvieron un poco más de tiempo para absorber las tendencias españolas”, comentó Gabbana.
Fusionando lo tradicional con lo moderno
La colección destaca por su uso meticuloso de técnicas artesanales sardas, que incluyen bordados detallados y trabajos en encaje que reflejan siglos de tradición. Los diseñadores han sabido captar la esencia de estos métodos, incorporando elementos como el punto de cruz y el ganchillo en prendas modernas que mantienen viva la herencia cultural. Los motivos florales y geométricos, presentes en la indumentaria tradicional, han sido reimaginados con un toque contemporáneo, logrando un equilibrio perfecto entre lo antiguo y lo nuevo. Este respeto por la artesanía se extiende también a los accesorios, donde encontramos bolsos y zapatos decorados con los mismos detalles minuciosos, creando un conjunto que no solo es visualmente impresionante, sino también un tributo a la maestría sarda.
Además de los materiales preciosos, la colección incorporó referencias pastoriles y tradicionales, como la mastruca, un abrigo de lana usado por los Mamuthones durante el Carnaval de Mamoiada. Dolce & Gabbana reelaboraron este abrigo en piel para hacerlo más ligero y ponible, combinándolo con pantalones de sastre y zapatos de cordones muy pulidos. “No entiendo cómo podían soportar todo ese peso. Incluso tenían campanas... ¡y pensar que hasta bailaban con ellas!”, exclamó muy asombrado Domenico Dolce durante la conferencia de prensa previa.
Innovación en la tradición
El desfile no solo capturó la esencia de la moda tradicional sarda, sino que la adaptó para el hombre moderno. Un ejemplo sorprendente fue la reinterpretación de las faldas, que los hombres sardos llevan sobre los pantalones. “No hemos inventado nada los diseñadores”, comentó Dolce, añadiendo que estas prendas no son las faldas a las que estamos acostumbrados hoy en día, sino un concepto más gráfico y duro, diseñado para un hombre más viril.
La colección también presentó camisas blancas almidonadas con cuellos muy altos y corsés confeccionados con la tradición de las alfombras sardas. “También tomamos la tradición de las alfombras y confeccionamos con ella corsés y faldas resistentes para hombre. No es la idea de falda a la que estamos acostumbrados a ver hoy en día, es un concepto completamente distinto: más gráfico y duro, que no llevan los chicos, sino los hombres. Por eso también verán un elenco de modelos más maduros, más adultos, porque este tipo de moda requiere un hombre más viril, y porque los hombres locales son realmente montañeros, son duros”, explicó Domenico Dolce.
Una celebración de la cultura y la moda
La decisión de incluir modelos más maduros subrayó la intención de los diseñadores de presentar una moda robusta y auténtica, adecuada para hombres que reflejan la dureza y la masculinidad de los montañeros sardos. Domenico Dolce concluyó: “Así que esperamos que lo vean bien y lo disfruten”. Y sin duda, el evento fue un éxito rotundo, dejando a los asistentes maravillados y subrayando el talento incomparable de Dolce & Gabbana para combinar tradición y modernidad en una celebración de la moda.
Impacto y futuro de Alta Sartoria
El desfile Alta Sartoria de Dolce & Gabbana en Cerdeña no solo fue un tributo a la tradición, sino también una muestra de cómo la moda puede ser una herramienta poderosa para contar historias y preservar la cultura. La capacidad de los diseñadores para adaptar elementos históricos y culturales a un contexto contemporáneo es una prueba de su genialidad y visión. Este evento no solo elevó la moda a un nivel artístico, sino que también reforzó la importancia de la cultura y la historia en el mundo de la alta costura.
Dolce & Gabbana continúan demostrando que la moda es mucho más que ropa; es una forma de arte que puede conectar a las personas con su herencia y con el mundo que les rodea. A través de eventos como el desfile Alta Sartoria, nos recuerdan que la moda tiene el poder de trascender el tiempo y las fronteras, creando un puente entre el pasado y el presente, y abriendo la puerta a un futuro donde la tradición y la innovación coexisten armoniosamente.