Apenas en 2023 recibimos el Reverso Tribute Chronograph de Jaeger-LeCoultre, con caja de acero u oro rosa de 18 quilates, y al instante se convirtió en un must de la sofisticación y máxima elegancia que parecía difícil de superar. Sin embargo, este año, la propia maison nos ofrece la reinterpretación de un clásico: la complicación deportiva más célebre en una versión de caja totalmente en oro rosa de 18 quilates que se complementa con una esfera, puentes del movimiento, índices aplicados y hebilla de oro rosa macizo de 18 quilates.
Solo se producirán 250 piezas de esta versión del Reverso Tribute Chronograph, así que debes apresurarte para ser de los afortunados y felices poseedores de una maravilla de la ingeniería relojera de todos los tiempos.
Ícono deportivo y pináculo de la innovación
Creado en 1931 con una caja protectora giratoria diseñada para llevarse en los campos de polo, los creadores de tendencias de todos los ámbitos adoptaron con prontitud al Reverso, atraídos por su estética art déco elegante y deportiva. Durante más de 90 años, la caja ha evolucionado –desde acero Staybrite en el original hasta metales preciosos–, mientras que la parte posterior de metal liso se ha decorado con grabado, laca, esmalte o piedras preciosas, e incluso se ha convertido en una segunda esfera. Su continua reinvención nunca olvida su identidad distintiva y es uno de los relojes de pulsera más reconocibles del mundo entero.
Nueva esfera y reverso calado de oro macizo
El Reverso Tribute Chronograph expresa la excelencia mecánica con gran creatividad estética y una artesanía exquisita que se siente, pero también se observa desde cualquier ángulo: la esfera del anverso incorpora un acabado decorativo en cuya superficie (también de oro rosa) se grabaron con láser unas finas líneas horizontales por todo el ancho de la esfera. Esta estética depurada, elegante y contemporánea refuerza la geometría rectilínea de la caja del Reverso y acentúa tres gallones horizontales por encima y por debajo de la esfera. Ante este fondo se destacan unos índices trapezoidales aplicados, agujas Dauphine y minutería ferrocarril en color negro, que genera un llamativo contraste con el oro rosa.
En el reverso, la esfera calada revela la complejidad del delicado mecanismo de cronógrafo: los puentes de oro rosa presentan bordes biselados a mano y decoración Côtes de Genève vertical. Los contadores, el segundero del cronógrafo y la minutería de este resaltan en tono negro para mejorar la legibilidad, mientras que las agujas del cronógrafo azules y los tornillos en ese mismo color añaden un toque visual sutil, pero muy elegante y combinable con prácticamente cualquier outfit y entorno que te venga a la mente. La pasión por el detalle en esta pieza es tal, que los índices de oro rosa de 18 quilates pulidos se fijaron de forma invisible a la minutería, por lo que parecen flotar sobre el movimiento.
Calibre 860
El Reverso Tribute Chronograph está equipado con el calibre Jaeger-LeCoultre 860, un movimiento de cronógrafo de cuerda manual totalmente integrado con pulsadores de inicio/parada y puesta a cero, un contador de 30 minutos retrógrado, un segundero central y un segundo huso horario. Según el concepto de la casa relojera sobre la integridad del producto, un movimiento debe ajustarse a la forma de la caja que lo alberga, por lo que el calibre también debía ser rectangular en esta ocasión. El resultado es un diseño de esfera equilibrado y distintivo, con un gran segundero de cronógrafo en la parte superior de la esfera y un indicador de 30 minutos retrógrado en un arco en la base.
Con frecuencia de 28,800 alternancias por hora, el calibre 860 incorpora un cronógrafo de rueda de pilares con embrague horizontal, en lugar del habitual vertical, para reducir el grosor total del movimiento. Para mostrar las horas y los minutos, tanto en la esfera delantera como en la trasera, el movimiento acciona dos juegos de agujas que se mueven en direcciones opuestas para indicar, en ambas caras, la hora de forma correcta. El calibre 860 ofrece 52 horas de reserva de marcha, considerando la gran demanda de energía de un cronógrafo retrógrado que combinará dos indicaciones horarias. Pese a esta complejidad y de sus no menos de 300 componentes, el calibre 860 respeta la filosofía de elegancia de Jaeger-LeCoultre y se adapta a una caja de 11.14 mm de grosor.
Y si todo lo anterior no fuera suficiente para enamorarte de esta pequeña gran maravilla, considera que el Reverso Tribute Chronograph no solo es el emblema de la belleza y la máxima precisión horaria, sino que es una nueva –y magnífica, si nos permites la acotación– expresión de la tradición, artesanía e innovación en cuanto a estilo y elegancia. No pierdas la oportunidad de ser uno de los elegidos para corroborar nuestras palabras.