En el siempre fascinante mundo de la relojería la innovación es uno de los pilares de la industria. Y para muestra un botón, ProPilot X Calibre 400 de Oris se adelanta al futuro y es hoy el primer reloj con una carátula creada en su totalidad con tecnología láser.
El innovador ProPilot X Calibre 400 de Oris
En la búsqueda de la innovación y la excelencia en sus procesos, técnicas, programas de sostenibilidad e ideas, la firma suiza fundada en 1904 mantiene distintas colaboraciones con distintos laboratorios y empresas de ingeniería que también comparten una visión similar del mundo. Por ejemplo, el Calibre 400 de movimientos automáticos antimagnéticos de cinco días de Oris es producto de la colaboración de la firma con otras instituciones.
El ProPilot X Calibre 400 de Oris es el resultado del trabajo continuo y conjunto de la marca con un laboratorio de investigación afiliado a la Universidad ETH Zürich. Este tipo de colaboraciones le da la oportunidad a estudiantes brillantes y emprendedores la posibilidad de ver sus ideas materializadas en un producto del mundo cotidiano. La técnica láser que se empleó para crear el color único de la carátula es una primicia en el mundo de la alta relojería y fue posible gracias al trabajo entre el laboratorio afiliado y el departamento de ingeniería de Oris, dirigido por Richard “Ipy” Siegrist. Esta constante colaboración se mantuvo durante un periodo de dos años aproximadamente, tiempo necesario para elaborar un prototipo y después entrar en la fase de producción en serie.
Todos los colores sin una gota de color
El elemento innovador y fascinante de esta pieza es la carátula, la cual está fabricada en titanio y todo lo que puedes apreciar en ella ha sido creado con tecnología láser. El tratamiento al que ha sido sometida, manipula la superficie para dividir la luz en sus distintos componentes y así crear un efecto de arcoíris que va cambiando dependiendo del ángulo de visión en el que lo aprecies.
Lo increíble es saber que sobre la caratula del nuevo Pro Pilot X en realidad no hay ni una sola gota de pigmento de color. Para crear el logotipo, los índices, los minutos y el texto de la carátula se utilizó otro proceso con láser para hacer posible el efecto tridimensional característico de estos elementos. Cabe mencionar que, por primera vez desde su lanzamiento no se ha incluido la fecha en la esfera del reloj, con la intención de hacer única su historia dentro de la relojería mundial. El efecto visual de la esfera resulta hipnótico y fascinante a los ojos.
Al interior del reloj, el Calibre 400 de Oris es el encargado de impulsar el movimiento automático de cinco días. Los niveles de anti magnetismo y fiabilidad del calibre 400 están respaldados por una garantía de 10 años. La caja, el bisel y la corona de 39mm son de titanio, al igual que el brazalete compuesto por tres eslabones. Se trata de una pieza vanguardista y de una belleza tecnológica que marcará un antes y un después en los procesos tecnológicos empleados en la fabricación de relojes.