La cuestión de si es mejor ejercitarse con el estómago vacío o después de comer ha generado un debate prolongado en el mundo del fitness. Sin embargo, la ciencia y expertos en nutrición y ejercicio han identificado varios motivos que respaldan la idea de alimentarse antes de entrenar.
Descubre por qué debes comer antes o después de tu rutina de ejercicio
Algunos expertos pueden encontrar beneficios en el ejercicio en ayunas para la quema de grasa, la mayoría de las veces es más beneficioso haber consumido alimentos previamente. El ejercicio en ayunas puede aumentar el estrés corporal, llevando a una mayor liberación de cortisol, lo que, en consecuencia, puede llevar al cuerpo a recurrir al músculo en busca de energía. Para aquellos que buscan aumentar la musculatura, esto podría ser contraproducente.
Otro aspecto crucial es la capacidad de resistencia durante el ejercicio. Un estudio señala que aquellos atletas que habían comido antes de realizar actividad física lograron mantener un ritmo y una distancia mayores en comparación con los que entrenaron en ayunas, lo que indica un mejor rendimiento físico con alimentación previa.
Esta ventaja no solo se traduce en una mayor quema de calorías y grasas durante el ejercicio, sino también en un efecto prolongado posterior al entrenamiento, ya que se logra una rutina más extensa.
Especialistas como el nutriólogo y entrenador Mau G. De la rosa apoyan la idea de alimentarse antes de realizar entrenamientos de alta intensidad. En este contexto, el cuerpo no accede a las reservas de grasa tan fácilmente como en rutinas de menor intensidad y mayor duración, lo que implica que la energía previa es fundamental para alcanzar un nivel de rendimiento acelerado.
Entonces, ¿cuál es la mejor estrategia? Los expertos sugieren consumir algunas proteínas al menos 30 minutos antes del entrenamiento. Esta acción proporciona energía sin elevar los niveles de insulina, manteniendo la quema de grasa y contribuyendo al mantenimiento o aumento de la masa muscular, un factor clave para el bienestar físico a largo plazo.
Aunque la decisión entre entrenar en ayunas o alimentado puede variar según tus objetivos y preferencias, la evidencia científica sugiere que una ingesta previa de alimentos, especialmente proteínas, puede ofrecer beneficios significativos para el rendimiento y la composición corporal.