Mientras crecemos pueden pasar varias cosas: cada vez tenemos más trabajo, más responsabilidades o menos energía. El punto es que, con el paso del tiempo, estar en forma se complica más y más, sin embargo, nunca es tarde para empezar y este nuevo año que está por comenzar es la oportunidad perfecta para que tú lo hagas también.
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Para brindarte un extra de motivación, platicamos con Erick Fregoso, empresario y padre de familia, quien, a meses de cumplir 52 años, presume un estado físico que cualquier treintañero envidiaría. Erick nos habló sobre sus hábitos y cómo logra mantenerse motivado y en forma frente a su implacable agenda y responsabilidades como hombre de familia. Esq. ¿Cómo empezaste a cuidarte y desde cuándo lo has hecho? EF. Desde chico siempre me inculcaron hacer algún tipo de deporte, ya fuera futbol, tenis o natación, pero siempre mantenerme activo. Sin embargo, nunca se me habló de la importancia de llevar una buena alimentación y como yo hacía mucho deporte, nunca le di la importancia a las calorías, ni a los tipos de alimentos que consumía. A los 24 años empecé a trabajar en un grupo de restaurantes de comida rápida, y dos años después dejé por un tiempo el deporte, me clavé mucho en el trabajo y las reuniones sociales así que mi camino por una vida saludable se vino abajo. Algunos años después, ya en mis 30, un día saliendo de bañarme no me gustó lo que vi en el espejo. Me había descuidado mucho y no era con lo que había comulgado por muchos años. En ese entonces, le pedí ayuda a un amigo que tenía un gimnasio para que me ayudara a corregir el rumbo y estar en forma de nuevo, por lo que me puso a un nutriólogo, a un entrenador personal y con su ayuda, recobré la imagen y la salud que había estado acostumbrado a llevar. Tomé la decisión de priorizar lo que me hacía sentir bien. Me hice el hábito de hacer ejercicio en el gym al menos 5 días a la semana, y de escoger las batallas en temas de alimentación. La única barrera que tengo es que nací con la columna muy inestable y eso me ha llevado a tener 3 cirugías de columna. Hoy en día me recomiendan no correr, saltar o brincar (nada de impacto), pero eso no ha sido un impedimento para poder entrenar en base a lo que tengo permitido hacer.
Esq. ¿Cuáles son tus hábitos diarios? EF. Ya tengo muchos años que prefiero vivir de día. Abro el ojo todos los días cerca de las 5am –sin despertador. Me quedo meditando cerca de 45 minutos, para después salir de la cama a prepararme un té verde orgánico con una cucharadita de aceite de coco. Después de esto, preparo mi proteína para tener buena energía para la hora y media de entrenamiento que hago diariamente. Regreso a casa a bañarme, tomar un desayuno bastante completo y alistarme para arrancar el día laboral (reuniones, visitas, comidas, conferencias, etc). Después de la oficina, trato de cenar alrededor de las 7:30 pm para meterme a la cama 9:30pm y descansar lo suficiente. Los fines de semana mi rutina no cambia mucho. Solo que entreno un poco más tarde y el resto del día lo aprovecho para hacer actividades recreativas al aire libre. Soy poco de quedarme en casa viendo televisión, aunque hay fines de semana que regreso temprano para ver alguna película. Con el tiempo me ha costado más trabajo recuperarme de las desveladas y en automático, al otro día ya no me da la energía para entrenar. Para los eventos sociales prefiero que sean comidas para no acabar tarde. Siempre que viajo, no importa si es de trabajo o placer, en mi maleta nunca falta mi ropa para entrenar y siempre busco donde poder hacer ejercicio por la mañana sin importar la hora.
Esq. ¿Qué tipo de alimentación llevas para ayudarte a estar en forma? EF. Aquí tengo que confesar que nunca he podido llevar un plan estricto de alimentación. Mis visitas al nutriólogo siempre fueron de orientación y desde hace varios años solo han sido para toma de mediciones solamente. Aquí es importante recalcar que cada organismo es diferente y que cada persona tiene objetivos distintos. Llevo mi alimentación con base en los requerimientos de mi entrenamiento. Lo que sí les puedo decir es que evito comer cosas fritas en aceite, azúcar (postres, dulces), y desde hace unos años evito los productos con exceso de sodio. Sí como bastante proteína (sobre todo pollo, carne roja y pescados) y también como bastantes carbohidratos (pastas, arroz, verduras cocidas). La fruta también forma parte importante de mi alimentación diaria. Es importante cuidar las porciones para no excederse y también saber cuáles frutas son las que tienen mayor contenido de azúcar. A mi licuado de proteína le pongo un plátano (que apenas esté madurando ya que, entre más maduro, más contenido de azúcar tiene). Respecto a la bebida, lo único que tomo es agua simple. Estoy acostumbrado a esto desde hace muchos mucho. Nunca tomo alcohol.
Esq. ¿Qué consejos le das a la gente que quiere estar en forma? EF. El consejo más grande que le puedo dar a la gente es que llevar un estilo de vida saludable NO es un propósito de año nuevo, ¡es una decisión de vida! Si en tu mente está empezar por un propósito en específico, normalmente tienen fecha de vencimiento. “Me voy a aplicar para que me entre mi vestido de novia”, “me voy a aplicar para el viaje a la playa que tengo”, “me voy a aplicar en un programa de 6 semanas que contraté en internet”, etc. Lo que normalmente sucede con eso es que una vez que se cumple esa fecha, la gente regresa a sus hábitos anteriores. Cada persona que elija hacer este cambio, con el tiempo le va a ir gustando tanto el resultado que cada vez lo irá adoptando más, sólo es cosa de decidirse a verse y sobre todo, sentirse mejor. Esq. ¿Cómo combinarlo con lo complicado del día a día? EF. Mucha gente pone de pretexto que no tiene tiempo por su trabajo, pero es solo cosa de organizarse bien y priorizar tu tiempo. Los últimos 4 años estuve como CEO de uno de los grupos restauranteros más importantes de México y no importaba si tenía miles de presiones, reuniones o viajes, siempre empezaba mi día con mi rutina de entrenamiento. ¡Eso era parte de mi terapia mental!
Las 10 claves de Erick para estar en forma sin importar la edad.
- Toma la decisión HOY de hacer un cambio en tu estilo de vida.
- Busca una disciplina que te guste y hazlo en un lugar que te orienten y te motiven.
- Sin importar lugar o tipo de trabajo que tengas, haz el hábito de hacer ejercicio en algún momento del día.
- Asesórate con un buen nutriólogo que te ayude a llegar a tus objetivos. No te claves en una dieta estricta, pídele que te oriente en qué tipo de alimentos tomar.
- Reduce al máximo tu ingesta de alcohol y de bebidas azucaradas (refrescos y jugos).
- Limita tu ingesta de azúcar al máximo (postres). Modera tus porciones de frutas.
- Haz ejercicios de fuerza, tanto gimnásticos como de levantamientos. ¡No dejes de combinarlo con cardio!
- Descansa adecuadamente. Las horas de sueño son muy importantes.
- Si tienes algún impedimento físico, siempre habrá modificaciones que puedas hacer a la disciplina que elijas. ¡El que quiere, puede!
- ¡Aprende a escuchar a tu cuerpo!
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