El Día Mundial del Perro, que se celebra cada 21 de julio, es una excelente oportunidad para reflexionar sobre el cuidado y bienestar de nuestras mascotas. Una de las responsabilidades clave al tener un perro es asegurarse de que reciba suficiente ejercicio, adaptado a su raza y edad. Los paseos no solo son esenciales para que los perros hagan sus necesidades, sino que también fortalecen el vínculo con sus dueños, mejoran la socialización y la salud mental del can.
Frecuencia y duración de los paseos de los perros
La cantidad de ejercicio que necesita un perro puede variar significativamente dependiendo de varios factores. Según PetMD, la raza, la edad, la tolerancia al ejercicio y la agenda del dueño son determinantes para establecer una rutina de paseos adecuada.
Razas deportivas y de trabajo: Alta energía
Los perros deportivos y de trabajo, como los Dóberman Pinscher, requieren múltiples paseos diarios y alta actividad física. Estas razas están diseñadas para ser activas y necesitan mucho ejercicio para mantenerse saludables y felices.
Razas pequeñas: Menos ejercicio
En contraste, las razas pequeñas o toy, como los Pomerania, tienen necesidades de ejercicio más modestas. Estos perros suelen ser más sedentarios y pueden contentarse con menos actividad física, prefiriendo ser perros falderos.
Edad del perro: Energía y resistencia
La edad del perro también es un factor crucial. Los perros jóvenes, especialmente los menores de cuatro años, son más enérgicos y disfrutan de juegos y actividades físicas más intensas. Por otro lado, los perros mayores pueden sufrir problemas de salud como diabetes o artritis, lo que reduce su resistencia y la cantidad de ejercicio que pueden tolerar.
Recomendaciones generales: Duración de los paseos
Para perros en buena forma física, PetMD recomienda paseos de entre 20 y 30 minutos diarios. Sin embargo, si tu perro tiene sobrepeso o problemas de salud, una caminata de 10 minutos puede ser suficiente. Para dueños con agendas apretadas, se sugieren paseos cortos de 10 a 15 minutos diarios, complementados con actividades dentro del hogar.
Los expertos destacan la importancia de observar el ritmo del perro durante los paseos para evaluar su capacidad de resistencia y ajustar la duración y frecuencia según sea necesario. Por ejemplo, los chihuahuas y otras razas pequeñas pueden necesitar hasta 45 minutos diarios, mientras que las razas grandes como el Pastor Alemán pueden requerir hasta 120 minutos de ejercicio al día.
Los paseos no solo son importantes para el ejercicio, sino también para las necesidades fisiológicas del perro. Los perros adultos suelen necesitar ir al baño entre tres y cinco veces al día. Los cachorros, debido a sus vejigas más pequeñas, pueden necesitar hacerlo con mayor frecuencia, incluso cada hora. Los perros mayores también tienen una mayor frecuencia para orinar debido a su capacidad reducida para contener la vejiga.
El Olfato: Una actividad enriquecedora
Permitir que los perros olfateen durante los paseos es altamente recomendado. Los expertos explican que los perros utilizan el olfato para identificar y comunicarse con otros perros en el área. Los machos suelen levantar la pata trasera lo más alto posible para marcar su territorio de manera efectiva. Además, algunos perros rascan el suelo después de orinar, una acción que ayuda a dejar un perfil olfativo más intenso debido a las glándulas en sus dedos.
En algunos países, la legislación refleja la importancia de los paseos. En Alemania, una ley exige que los dueños de perros los saquen a pasear al menos dos veces al día durante una hora. Este cambio en la ley fue impulsado tras un estudio que reveló que muchos perros en el país no estaban recibiendo suficiente actividad física.
Los cachorros necesitan salir con mayor frecuencia para adaptarse y aprender a hacer sus necesidades fuera de casa. Los expertos recomiendan paseos breves de unos 10 minutos, seis o siete veces al día, especialmente en sus primeros meses de vida después de completar su vacunación. Estos paseos frecuentes ayudan a los cachorros a establecer una rutina y a socializar adecuadamente.
Para los perros ancianos, aunque todavía requieren ejercicio, este debe adaptarse a su ritmo y condición física. La atención a sus necesidades específicas ayuda a evitar problemas de salud y promueve su bienestar general. Paseos más cortos y menos intensos son ideales para estos perros, asegurando que se mantengan activos sin sobrecargarlos.