Solo conociendo para qué sirve un taquímetro lograrás definir si tu próximo reloj requiere esta antigua y valiosa función.
El taquímetro empezó a integrarse, a algunos relojes de pulsera, desde la década de los años 30 del siglo pasado. Su sentido lo hizo especialmente útil en el automovilismo y la aviación. En la actualidad, esta complicación, o función, es una de las tantas pruebas de que estos instrumentos están en posibilidades de ofrecernos más que la hora. Pero, ¿qué es un taquímetro y para qué sirve?
¿Qué es un taquímetro?
Efectivamente, el taquímetro es una complicación relojera, es decir, una función adicional de los relojes, más allá del indicar la hora. El tema es que dicho lujo no es para cualquier tipo de reloj, pues son los cronógrafos los que, por lo normal, vienen aparejados con este.
En caso de que exista la duda, aclaremos que el cronógrafo es, a su vez, una complicación de los relojes que tiene el propósito de indicar y medir el tiempo que ha pasado en un determinado período. Se le puede referir también como “cronometro”, aunque tal término, en sentido estricto, le corresponde a otra cosa.
Tomando en cuenta lo mencionado hasta ahora, el taquímetro es una función de los relojes cronógrafos que sirve para medir unidades por hora o, dicho de otra manera, una escala para la velocidad de lectura en una unidad base específica.
En un reloj, el taquímetro suele venir impreso en la esfera o en el bisel. Esta complicación es típica de los relojes deportivos, ya que ellos requieren este tipo de función para mejorar sus valores añadidos.
Un ejemplo
Para ilustrar el sentido del taquímetro, nos valdremos de una de las situaciones más comunes para las cuales es usado: medir la velocidad de un auto en movimiento utilizando los kilómetros señalados en la vía. Entonces, si inicias tu cronógrafo, al pasar por una marca indicada en la carretera, notarás que el número del taquímetro donde se detuvo la aguja presentará la velocidad que fue necesaria para recorrer ese kilómetro.