En el intrigante mundo de las relaciones humanas, las dinámicas entre pareja pueden presentar cambios sorprendentes. Un estudio reciente ha arrojado luz sobre un fenómeno curioso: los hombres pueden perder hasta 5 kilos cuando tienen una amante. Esta pérdida de peso, que ocurre en los primeros meses de la relación extramatrimonial, podría estar relacionada con el deseo de verse más atractivos para la nueva pareja.
¿Los hombres pierden peso cuando tienen una amante? La ciencia lo explica
Según el estudio realizado por el sitio de citas para casados “IllicitEncounters”, el 72% de los hombres que mantienen una relación extramatrimonial han reportado una significativa pérdida de peso. En los primeros tres meses, los hombres pueden perder un promedio de 11 libras, aproximadamente 5 kilos. Esta transformación física se debe, en gran medida, a un renovado interés en su apariencia y un esfuerzo consciente por impresionar a la nueva pareja.
Un participante de la encuesta, compartió su experiencia: “Me di cuenta de que estaba ganando peso aproximadamente un año después de mi matrimonio, y desde entonces, mi peso comenzó a aumentar. Sin embargo, cuando comencé una relación extramatrimonial, me comprometí a hacer más ejercicio y a cuidar mi alimentación para mantenerme atractivo para mi amante”.
La psicología detrás del cambio
Los expertos explican que este comportamiento no es inusual. Al inicio de una relación, tendemos a esforzarnos más en lucir bien para la otra persona. Este fenómeno es especialmente evidente en relaciones extramatrimoniales, donde el deseo de mantener la atracción y la emoción iniciales es más fuerte.
El estudio también indica que, a menudo, los hombres empiezan a llevar comida chatarra a casa para evitar levantar sospechas sobre su repentina pérdida de peso. Este acto de equilibrio entre mantener su apariencia física para la amante y evitar ser descubiertos por su pareja principal puede generar un patrón de comportamiento bastante complejo.
La rutina y la monotonía dentro del matrimonio son factores que pueden llevar a algunos hombres a buscar aventuras fuera de su relación conyugal. La encuesta sugiere que la infidelidad puede ser un escape de la rutina diaria y una forma de recuperar la emoción y la novedad perdidas con el tiempo.
No obstante, no todas las pérdidas de peso son indicativas de infidelidad. Es importante no saltar a conclusiones precipitadas si su pareja comienza a perder peso o a hacer más ejercicio. Cada relación y cada individuo son únicos, y múltiples factores pueden influir en estos cambios.
Factores que conducen a la infidelidad
El sondeo realizado a 495 personas identificó varias razones que pueden llevar a la infidelidad. Entre ellas se encuentran la ira, la baja autoestima, la falta de amor, el bajo compromiso, la necesidad de variedad, el abandono, el deseo sexual y las circunstancias personales. Es crucial reconocer que estos factores surgen del comportamiento y las necesidades de la persona infiel, y no de la persona afectada.
La frustración en el matrimonio es un desencadenante común. En muchos casos, la persona infiel puede haber intentado resolver los problemas matrimoniales sin éxito. La falta de habilidades para comunicar eficazmente sus sentimientos también puede desempeñar un papel crucial.
Superando la infidelidad
Enfrentar la infidelidad puede ser uno de los desafíos más grandes para cualquier pareja. Mientras algunas parejas logran superar este obstáculo y fortalecer su relación, otras pueden encontrar insuperable la traición. La clave para avanzar radica en la comunicación abierta, la comprensión y, en muchos casos, el apoyo de un terapeuta capacitado.
Para aquellos que buscan reparar su relación después de una infidelidad, es fundamental dejar de engañar a la pareja y a uno mismo. La paciencia y el espacio son esenciales para que ambos miembros de la pareja puedan procesar sus emociones y trabajar hacia la reconciliación.