Para muchos hombres, la sexualidad sigue siendo una parte fundamental de su bienestar. Sin embargo, a medida que la edad avanza, algunos pueden enfrentar dificultades que alteran su disfrute y confianza sexual. El orgasmo retardado, un trastorno que afecta a uno de cada diez hombres mayores de 40 años, es un tema poco discutido pero relevante, especialmente cuando se trata de relaciones sexuales satisfactorias.
La paradoja de la velocidad: ¿por qué algunos hombres tardan demasiado?
La mayoría de los hombres se quejan de que el orgasmo llega más rápido de lo que desearían. Sin embargo, existe el otro lado de la moneda: algunos hombres experimentan una dificultad considerable para llegar al clímax, incluso después de 30 minutos o más de estimulación. Esta prolongación excesiva puede ser dolorosa y angustiante, tanto para el hombre como para su pareja, afectando la calidad de la relación sexual.
El impacto emocional y físico del orgasmo retardado
Aunque el orgasmo retardado se asocia principalmente con las mujeres, especialmente por la brecha en los orgasmos en las relaciones heterosexuales, este trastorno también afecta a los hombres. En casos graves, algunos hombres ni siquiera pueden alcanzar el clímax, lo que se conoce como anorgasmia. Es crucial comprender que, al igual que otros trastornos sexuales, el orgasmo retardado tiene un impacto emocional y físico significativo, por lo que no debe ser ignorado.
¿Qué ocurre durante un orgasmo? Un proceso complejo entre cuerpo y mente
El orgasmo masculino no es simplemente una respuesta física; es un proceso cerebral. Comienza con la estimulación física, mental o visual, lo que provoca la liberación de dopamina en el cerebro. A medida que la excitación aumenta, el cerebro envía una oleada de sustancias químicas, como la oxitocina, que generan la sensación de placer. Sin embargo, la eyaculación, aunque ocurre a menudo al mismo tiempo que el orgasmo, es un proceso distinto que involucra contracciones musculares involuntarias. Las complicaciones en cualquier parte de este proceso, ya sea el cerebro, los genitales o los músculos pélvicos, pueden alterar la capacidad de alcanzar el clímax.
Causas principales del orgasmo retardado en hombres
Existen varias razones por las cuales algunos hombres tienen dificultades para alcanzar el orgasmo:
Medicamentos: El uso de ciertos fármacos, como los antidepresivos ISRS (inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina), opiáceos o betabloqueadores, puede interferir con la capacidad de alcanzar el orgasmo al elevar el umbral necesario para ello.
Problemas neurológicos: Trastornos como la esclerosis múltiple, el Parkinson, o incluso diabetes, pueden afectar las vías neurales entre el cerebro y los genitales, dificultando el proceso del orgasmo.
Preocupaciones relacionadas con la pareja: El dolor o incomodidad durante las relaciones sexuales de las parejas también puede influir en el retraso del orgasmo. Los problemas de sequedad vaginal o diferencias en la libido son factores comunes.
Factores psicológicos: El estrés, la ansiedad y la depresión son comunes en los hombres con orgasmo retardado. Estos trastornos pueden dificultar la respuesta del cerebro a la excitación sexual, resultando en una falta de clímax.
Tratamientos disponibles: recuperar el control sobre tu sexualidad
Aunque no existen tratamientos específicos aprobados por la FDA para el orgasmo retardado, los hombres afectados pueden recurrir a varias opciones:
Medicamentos: Algunos fármacos promotores de dopamina, como el bupropión, han demostrado ser útiles en pequeños estudios para combatir el orgasmo retardado.
Terapia sexual: Hablar con un terapeuta sexual y considerar la posibilidad de incluir a la pareja en la terapia puede ser fundamental para abordar los problemas emocionales o relacionales que interfieren con la sexualidad.
Dispositivos de estimulación: Los dispositivos de estimulación, como los vibradores para los genitales o la próstata, pueden aumentar la excitación suficiente para ayudar a los hombres a alcanzar el orgasmo más fácilmente.
El orgasmo retardado es un tema serio, pero tratable. Si sientes que tu vida sexual se ha visto afectada por este trastorno, lo primero es hablar con un profesional de salud sexual que pueda guiarte hacia el tratamiento adecuado. Recuerda que la salud sexual es una parte vital de tu bienestar general, y buscar ayuda no solo mejora tu vida íntima, sino también tu confianza y felicidad en otros aspectos de la vida.
